3 abonos naturales para tus árboles frutales

El limonero y otros árboles frutales como el naranjo, mandarino, peral, ciruelo e incluso el propio palto, necesitan de un buen abono para crecer y desarrollar correctamente sus frutos. Si dentro del huerto urbano se cuenta con esta especie de cultivos, es importante conocer qué opciones naturales se pueden tomar en cuenta.

Importancia del abono en los árboles frutales

Este tipo de productos agregan importantes nutrientes (nitrógeno, fósforo y potasio) que ayudan a los cultivos a llevar a cabo el proceso de fotosíntesis y por ende fomentar el crecimiento del árbol frutal, aquí se pueden encontrar minerales esenciales que se ven involucrados en el cuajado del fruto y desarrollo óptimo de las hojas o tallos.

Si en casa se cuenta con el Limonero u otro tipo de árboles frutales y se desea que crezcan mucho más rápido y en excelentes condiciones, entonces te interesará descubrir los tipos de abono naturales que puedes agregar a tus árboles para que crezcan de forma exitosa y fructífera. 

1.- Estiércol de rumiantes

Es el excremento animal de equinos, vacunos, ovinos principalmente y es utlizado para fertilizar los cultivos agrícolas desde el inicio de la agricultura ya que contiene un alto porcentaje en nitrógeno y materia orgánica. Es de fácil aplicación y se recomienda aplicar una vez seco.

2.- Humus de lombriz

Facilita la absorción de potasio, magnesio, fósforo y calcio, mejorara la estructura física del suelo favoreciendo el enraizamiento y evitando la deshidratación. Protege de patógenos.

3.- Abono con desechos orgánicos

Las cáscaras de huevo, de plátano o los restos de frutas y verduras pueden prepararse como una especie de abono natural para suplir las necesidades nutricionales de la tierra. Recuerda que se deben de cortar en pequeños trozos y agregar directamente a la tierra o licuar con un poco de agua y agregar en forma de líquido de fácil absorción.

Estos tipos de abonos son perfectos para garantizar el crecimiento de los árboles frutales que necesitan de una buena cantidad de nutrientes para crecer en óptimas condiciones.